Historia Principal

 DESTINOS PERROS

Había una vez una chica pelirroja llamada Mariana, ella era una gran fanática de las radio novelas de amor. Pasaba horas escuchando las historias en su radio antiguo mientras soñaba con encontrar su propio romance apasionado.

Un día, Mariana consiguió un nuevo trabajo en una empresa de publicidad. Estaba emocionada de comenzar su nuevo trabajo y conocer a sus nuevos compañeros de trabajo. Pero cuando llegó el primer día, se dio cuenta de que su jefe, Dylan, era un hombre casado.

Mariana trató de ignorar sus sentimientos por Dylan, pero no pudo evitar sentirse atraída por él. Cada vez que él estaba cerca, su corazón latía con fuerza y sus mejillas se ponían rojas.

A medida que pasaba el tiempo, Mariana se encontraba a sí misma cada vez más enamorada de Dylan, aunque sabía que era imposible, no podía evitar soñar con estar a su lado.

Un día, mientras trabajaban juntos en un proyecto, Dylan notó que Mariana se veía triste y distante. Después de preguntarle qué le pasaba, Mariana finalmente confesó sus sentimientos hacia él.

Dylan se sorprendió al principio, pero rápidamente dejó en claro que no podía corresponder a los sentimientos de Mariana debido a su matrimonio. A pesar de esto, él y Mariana continuaron trabajando juntos y construyendo una fuerte amistad.

Con el tiempo, Mariana aceptó que nunca podría estar con Dylan de la manera que quería, pero todavía valoraba su amistad y su trabajo juntos. Y aunque todavía amaba las radio novelas de amor, aprendió que el amor real a veces puede ser complicado y doloroso.

A pesar de la negativa de Dylan, ella no pudo evitar continuar sintiendo una fuerte atracción hacia él. Trató de olvidarlo, pero el corazón no siempre sigue la razón.

La amistad entre ellos continuó, pero la tensión romántica seguía presente en cada uno de sus encuentros. Mariana trataba de disimularlo, pero Dylan lo notaba y esto comenzó a afectar su relación laboral.

Un día, en medio de una discusión por trabajo, Mariana confesó sus sentimientos nuevamente, pero esta vez lo hizo con un tono de tristeza y resignación. Sabía que era imposible estar juntos, pero su corazón no quería dejar de sentir.

Dylan, angustiado y en un momento de debilidad, le confesó que también sentía algo por ella, pero que no podía dejar a su esposa e hijos por una aventura.

Mariana, desesperada, intentó convencerlo de que podrían intentar tener una relación secreta, pero Dylan se negó rotundamente. No quería destruir su familia por un capricho.

La tensión entre ellos se hizo insostenible, y finalmente, Mariana decidió renunciar a su trabajo. No podía soportar estar cerca de Dylan sin poder estar juntos.

La chica pelirroja volvió a su casa, sola y desolada, para escuchar una vez más una radio novela de amor. Esta vez, sin embargo, las historias de romance y felicidad la hicieron llorar, recordándole lo doloroso que es el amor cuando no puede ser correspondido.

Después de días de estar en casa, Mariana decidió que era hora de hacer algo para distraer su mente y sanar su corazón herido. Recordando su amor por las radio novelas, se le ocurrió la idea de escribir su propia historia de amor.

Se sentó frente a su viejo radio y comenzó a escribir una historia sobre un amor imposible entre una chica pelirroja y su jefe casado. A través de la escritura, Mariana pudo dar rienda suelta a sus emociones y contar su propia versión de la historia que estaba viviendo.

Con el tiempo, la historia se fue desarrollando y tomó un giro inesperado. La protagonista, en vez de rendirse ante un amor imposible, decidió seguir adelante con su vida y buscar su propia felicidad.

La historia se convirtió en un éxito en la estación de radio local, y Mariana recibió muchos elogios por su creatividad y su habilidad para contar una historia emocionante. Además, muchos de sus oyentes le escribieron para contarle que su radio novela les había dado esperanza en momentos difíciles de sus propias vidas.

Con cada episodio, Mariana se sintió más y más liberada. Había encontrado una forma de expresarse y de compartir su dolor, mientras que al mismo tiempo había creado algo hermoso que podía tocar la vida de los demás.

Incluso Dylan, su exjefe, escuchaba la radio novela de Mariana. Un día, después de escuchar un episodio particularmente conmovedor, decidió llamarla para felicitarla por su trabajo. Durante la conversación, le pidió perdón por haberle causado tanto dolor y le aseguró que valoraba su amistad.

Mariana sonrió al colgar el teléfono. Aunque seguía amando a Dylan, sabía que había encontrado su propia forma de ser feliz y de superar el dolor. Y gracias a su radio novela, había dado a otros la esperanza y el consuelo que ella misma necesitaba.

Lamentablemente, la tristeza y el dolor que Mariana había estado sintiendo durante tanto tiempo finalmente la abrumaron. No podía soportar la idea de seguir viviendo sin poder estar con el hombre que amaba.

Desesperada, decidió escribir una última radio novela, con una historia aún más trágica y conmovedora. En ella, la protagonista, al igual que Mariana, se enfrentaba a un amor imposible y finalmente tomaba la decisión de quitarse la vida.

Cuando la radio novela se publicó, los oyentes se conmovieron por la historia, pero también se preocuparon por la salud mental de Mariana. Desafortunadamente, sus temores eran ciertos: Mariana había seguido el mismo camino que su personaje y se había quitado la vida.

El mundo quedó consternado por la noticia, y muchos se preguntaron qué había llevado a una talentosa y creativa escritora como Mariana a tomar una decisión tan trágica. Pero lo cierto es que Mariana había estado luchando con sus propios demonios durante mucho tiempo, y a pesar de sus talentos y su creatividad, no había podido encontrar la felicidad que tanto anhelaba.

La radio novela que Mariana había escrito como su último legado dejó una huella imborrable en la memoria de todos los que la escucharon. Aunque su final fue triste y desgarrador, la historia también dejó un mensaje poderoso sobre el valor de la vida y la importancia de luchar por nuestros sueños y nuestros amores, incluso cuando parecen imposibles de alcanzar.